Conocido por su elegante vestir y su Lamborghini, Rudy Kurniawan llegó muy lejos en el mundo de los vinos exclusivos.
Ahora enfrenta hasta 40 años de cárcel, informan Peter Hellman y Mitch Frank en Wine Spectator luego de haber sido declarado culpable de falsificar vinos fines y engañar a numerosos multimillonarios con sus falsificaciones.
Kurniawan, nacido en Indonesia de familia de origen chino y residente durante años en Los Angeles, mezclaba vinos jóvenes con los vinos más antiguos, para venderlos a coleccionistas.
Luego, usó su colección como garantía para pedir préstamos millonarios.
Kurniawan surgió en los círculos de vinos raros hace una década y al poco tiempo su presencia no faltaba en degustaciones y subastas, donde era conocido por su pasión por los Borgoña y un talento para olfatear falsificaciones. Otros coleccionistas lo llamaban el “Dr. Conti” por su amor a Domaine de la Romanée-Conti. Pronto estaba recorriendo bodegas en EUA y Europa, en busca de vinos de colección, y vendiendo cientos de botellas en las subastas y ventas privadas.
En un momento, una de sus subastas recaudó en la casa Acker, Merrall & Condit recaudó $24.7 millones, cifra nunca antes alcanzada, dice Wine Spectator.
La evidencia del gobierno incluía etiquetas, manipuladas para dar una apariencia de antigüedad, igual que botellas atribuídas falsamente a viñedos.
Testificaron en contra de él dueños de viñedos franceses.
La defensa dijo que el mundo de los vinos finos es un mundo de falsificaciones y se estaba usando a Kurniawan como chivo expiatorio.
Pero el jurado federal terminó creyendo al gobierno.
A votre santé!