fin_dinastía_BushFin de la dinastía Bush. La victoria de Donald Trump en Carolina del Sur fue, ante todo, el fin de la dinastía Bush y un tortazo al ala tradicional del partido republicano, el llamado establishment.

Jeb Bush, a quien el verano pasado se le consideraba en favorito para ganar la nominación republicana al partido y con alrededor de US$150 millones en sus arcas parecía imparable, anunció su retiro.

Cabizbajo, húmedos los ojos, se retiró humillado. Y sin un centavo.

Señalamos aquí que en el mismo momento en junio 2015, Trump comenzó a atacarlo llamándolo “un tío de baja energía”. Nunca se recuperó. Para el candidato hijo y hermano de presidentes, no bastó con llevar a Carolina del Sur a su nonagenaria madre, ni a su hermano, el expresidente George W. Bush. La suerte estaba echada.

En el estado sureño, el electorado republicano prefirió a Donald Trump, cuyo discurso racista, anti inmigrante, agresivo y cínico, supo alcanzar su objetivo entre un sector del electorado abiertamente racista, anti inmigrante, agresivo y cínico. La única diferencia entre Trump y sus partidarios es que éstos son de bajos ingresos y él es mil millonario.

Con la salida de Bush, queda el interrogativo de por quién votarán sus partidarios, algo que comenzaremos a ver en Nevada, la próxima entrega de esta serie de TV realidad sobre la democracia más cara del planeta.

En el campo del partido demócrata, en los caucus (asambleas) de Nevada, Hillary Clinton venció al socialista demócrata Bernie Sanders for 52.7% a 47.2%. Cerrada la victoria.

Los partidarios de los Clinton, la otra dinastía política en EUA, se apresuraron a cantar los elogios de la candidata, que salió cojeando de New Hampshire.

Hay varias maneras de ver los resultados. La primera es la tradicional: Hillary ganó justo y parejo. Una victoria es una victoria. Esta es la opinión de los medios tradicionales, que nuevamente han comenzado a descartar la capacidad de Sanders de superar este revés.

La otra, que es la que sigue impulsando Bernie Sanders y sus activistas, sostiene que solo hace unos meses Hillary le llevaba una ventaja de 40 puntos al socialista. Ganó por menos de seis. Además, al analizar los resultados de quién votó y por qué, resalta el hecho que Sanders ganó el voto latino por 53% y el 68% del voto de la juventud minoritaria.

La mayoría del electorado el Nevada es mayor de 45%, lo cual inclinó la balanza hacia la candidata más tradicional.

La semana entrante los demócratas tendrán su elección primaria en Carolina del Sur, donde Hillary parece tener asegurado el apoyo de la maquinaria del partido demócrata. Especialmente entre la comunidad afroamericana.

Sanders tiene el apoyo entusiasta de la juventud.

Entusiasmo vs maquinaria. Ello definirá los resultados en días venideros.

En otros titulares, altos capos republicanos se han comprometido a bloquear cualquier nominación por el presidente Obama para reemplazar en la corte suprema a Antonin Scalia, el jurista conservador que falleció la semana pasada. Obama ya está estudiando CVs. (Irónico es que los demócratas, con la participación del joven senador por Illinois Barack Obama, en 2006 intentaron bloquear la nominación de Samuel Alito nombrado por George W. Bush ).

Mientras tanto, el CEO de Apple seguía firme en su rechazo a la solicitud del FBI de abrir el teléfono inteligente de los terroristas de San Bernardino.

Otra semana que pasó en EUA

Carlos F. Torres

 

 

 

Carlos F. Torres
Director, El Molino Online
New York, NY febrero 21, 2016