Después de escuchar a docenas testigos que presentaron la evidencia que los demócratas esperan condenará a Donald Trump, el proceso de impeachment o juicio político entra una nueva fase.
Ejercido solo tres veces antes en la historia de la República de Estados Unidos de América, los cargos en este proceso constitucional surgen de la presunta presión del presidente y una serie de individuos en su administración al gobierno de Ucrania para que investigara a Joe Biden, posible rival en la reelección del presidente en 2020.
La administración Trump suspendió US$400 millones en ayuda militar a Ucrania hasta que los ucranianos anunciaran públicamente la investigación.
En el transcurso de dos semanas, el Comité de Inteligencia de la Cámara escuchó el testimonio de 12 testigos: funcionarios pasados y presentes de la Casa Blanca, diplomáticos y asistentes departamentales que hablaron ampliamente sobre las actividades de Trump en Ucrania. Desde último día de audiencias públicas programadas para el jueves, el presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, de California, no ha pedido ningún testimonio adicional, lo que sugiere que el comité comenzará a redactar un informe de sus hallazgos.
Los investigadores escucharon testimonios convincentes y reveladores de testigos sobre una “campaña de desprestigio” contra diplomáticos de carrera que luchan contra la corrupción en Ucrania.
El drama se intensificó cuando el embajador estadounidense en la Unión Europea, Gordon Sondland, una figura clave en la investigación, testificó el miércoles que creía que había un quid pro quo relacionado con una reunión de la Casa Blanca.
Sin embargo, quedan interrogantes sobre los posibles testimonios de Rudy Giuliani, ex alcalde de New York, abogado personal del presidente y quien sin cargo oficial en la administración, hizo, deshizo, ordenó diplomáticos y políticos de Ucrania. Otro testimonios que están en veremos el de John Bolton, antiguo asesor de seguridad nacional; Mick Mulvaney, secretario interino del gabinete; Mike Pence, vice presidente; y Mike Pompeo, Secretario de Estado.
Estos testimonios se encuentran en un limbo político ya que el presidente ha ordenado que NO colaboren con la investigación, la que él considera corrupta e inconstitucional.
Bajo los protocoles de la investigación de juicio político, Schiff debe presentar un informe sobre los hallazgos y recomendaciones del comité y transferir todos los registros y materiales al Comité Judicial de la Cámara, que luego tomará las riendas de la investigación.
El Comité Judicial tiene la tarea de redactar los artículos de juicio político.
A medida que el proceso entre en la siguiente fase, es probable que el Comité Judicial también realice audiencias públicas. A Trump y a su equipo legal se les otorgarán derechos de debido proceso, como llamar a testigos para testificar, pero el presidente Jerry Nadler de Nueva York puede rescindir esos derechos si la Casa Blanca bloquea la investigación o se niega a cooperar.
Después de eso, el comité redactaría artículos de juicio político y celebraría una votación del comité. Si es aprobada por mayoría en el Comité Judicial, los artículos pasarían a una votación de sesión plenaria.
El cronograma para los próximos pasos en el proceso está por definirse. Algunos miembros especulan que Schiff podría presentar su informe al Comité Judicial alrededor del 3 de diciembre cuando el Congreso regrese del receso de Acción de Gracias. Otros creen que un voto de juicio político podría llegar a la Cámara antes de las vacaciones de diciembre.
Mientras tanto, los republicanos de la Cámara parecen mantenerse firmes con el presidente. Incluso algunos republicanos que parecían propensos a desertar siguen firmes tras el presidente.
Otra semana que pasó en EUA.
CFT, Director El Molino Online
New Orleans, LA
11/24/2019
