La telenovelaCada noche a las seis de la tarde en punto, en todos los canales de Colombia, empieza la telenovela “Todo Bien Todo Bien, Gracias a Nosotros, Ustedes Sigan Encerrados”.  El nombre es largo, imagínese Usted el ladrillo mi estimado lector

Su protagonista, el presidente Duque cuyo rasgo actoral fundamental es una voz de obispo pederasta irresistible.  El antagonista, el Covid-19, el pinche virus mutante que el protagonista pretende someter y mantener bajo control ordenando a los ciudadanos el encierro, la quiebra y la desesperanza. 

Juan Manuel UrrutiaEl reparto, la señora vicepresidente, con su hablado de mamá boba regañona.  El ministro de salud siempre con cara de ponqué.  Un grupo de “expertos” que más bien parecen culebreros.  La ministra de transporte con su desagradable tono de maestra de escuela de esas que le daban a uno con la regla si no se sabía las tablas de multiplicación.  El ministro de comercio que trata de explicar lo que el ministro de hacienda no puede explicar en vez de pensar en el sector que si le compete y que es el más afectado por el encierro.  De vez en cuando invitan a uno que otro extra, generalmente alcaldes o gobernadores que más bien parecen miembros de un comité de aplausos que gobernantes locales autónomos.   

Brillan por su ausencia:

La alcaldesa de Bogotá que montó su propio chou, con muy buena sintonía y empatía iniciales pero que se fue diluyendo a punta de regaños al protagonista de la telenovela de la competencia, y episodios en supermercados y pizzerías.

El ministro de defensa que está estudiando el libreto de otro chou, en el que explica vehementemente que no que las medidas del viernes no tienen nada que ver con el escándalo de Semana del sábado que estaba anunciado desde el jueves.  Y cree que le creen.   Cuando no está tapando esa olla podrida está explicando porque las compras con groseros sobre costos pertenecen a la reserva por razones de seguridad nacional. U sea la corrupción se volvió secreto de Estado.  Vamos bien

El ministro de hacienda que sigue pensando en tomar las medidas que tenía que tomar cuando su presidente de él, el protagonista de la telenovela de las seis nos mandó encerrar.  Ya paqué ministro.

El ministro de agricultura que sigue tratando de explicar la saga de una serie que se llamó Agro Ingreso Seguro que se escenifica en Finagro y cuyos protagonistas son los “empresarios” del campo, porque a esas series no se les puede meter campesinos de verdad.

La ministra de justicia que cree que lo mejor para disminuir el hacinamiento en las cárceles es dejar que los internos y de paso los guardias sindicalizados que tanta lora dan se mueran de Covid-19.  En una sola cárcel hay cerca de 600 contagiados.

Siempre es que la creatividad colombiana sigue estando a la altura de las grandes producciones televisivas del mundo.  Competimos con Venezuela, con Turquía y con México.