“Cuando se hace durante 50 años lo mismo y no funciona, ha llegado la hora de hacer algo nuevo”, con esas palabras en el discurso anual del Estado de la Unión, el presidente Barack Obama se refirió a su decisión de normalizar relaciones con Cuba. Igualmente reafirmó su compromiso (expuesto al país durante su primera campaña electoral en 2008) de cerrar la prisión de Guantánamo en territorio cubano. “No voy a vacilar en mi decisión de cerrarla”.
Sobre la crisis económica que ha marcado su presidencia, dijo que “La sombra de la crisis ha pasado y el estado de la Unión es fuerte”.
Por primera vez en su presidencia, Obama se dirigió a un Congreso donde la oposición republicana domina ambas cámaras.
“Esta noche, después de un año decisivo para EUA, nuestra economía está creciendo y creando puestos de trabajo al ritmo más rápido desde 1999. Nuestra tasa de desempleo es ahora más bajo de lo que era antes de la crisis financiera. Más de nuestros niños se están graduando que nunca; más de nuestro pueblo está asegurado que nunca; nos hemos liberado de las garras del petróleo extranjero en que hemos estado en casi 30 años”.
“Traigo buenas noticias, mi gente”, dijo.
Anunció, además, reformas económicas que beneficien la clase media, incluso días pagos para los enfermos y cuidado infantil, a lo cual llamó una necesidad.
“¿Vamos a aceptar una economía en la que a solo unos cuantos les va espectacularmente bien?. O nos vamos a comprometer a una economía que genera mejores ingresos y oportunidades para todos los que se esfuerzan”, dijo el presidente. “Necesitamos fijarnos objetivos más amplios para asegurar que el gobierno no para el progreso que vamos a realizar. Necesitamos hacer mucho más”.
Sobre la inmigración dijo que hay que reformar el sistema, no “luchar nuevamente viejas batallas”. Cualquier ley que no tenga este objetivo, “mercece mi veto”.
Sobre el Medio Oriente, dijo que detener los avances del Estado Islámico son prioridad.