En EUA, más personas trabajan para el gobierno de los que trabajan en los sectores de la construcción, agricultura, silvicultura, manufactura, minería y servicios públicos combinados, escribe Stephen Moore, economista de la página editorial del Wall Street Jounal.

Esta es, dice, la razón de la crisis fiscal de los estados de la unión: gastan mucho más de lo que reciben.

En cifras, esto significa que 22.5 millones de estadounidenses son empleados del gobierno, mientras que 11.5 millones trabajan para la manufactura. En 1960 era casi lo opuesto. Como caso extremo, menciona al estado de New York, la capital financiera del mundo, donde el gobierno tiene contratados el doble de personas (1.48 millón) que la industria financiera (670,000).

Se debe, indica, a los cambios en la productividad — desde la agricultura a las telecomunicaciones — en el sector privado. Contrasta estos avances con la estagnación en el sector público donde mientras aumenta el costo, la productivida va en declive. “En el periodo 1970-2005”, dice, “el gasto por estudiante, ajustado por la inflación, dobló. Mientras que los resultados en las pruebas estandarizadas no han sufrido ningún cambio”.

Lamenta que un creciente número de graduados universitarios quieran entrar a trabajar para el gobierno: “Cuando a los 23 años no están dispuestos a tomar riesgos en sus carreras, tenemos problemas entre manos. Desafortunademente podremos terminar con una generación que aspira a trabajar para el Departamente de Vehículos Motorizados”.

Concluye diciendo que para salir de esta situación crítica, el país necesita generar más empleos en los sectores que producen no los que consumen.

Artículo en inglés

Foto cortesía de leonardopires via flickr