El nuevo programa anunciado el 26 de marzo por la administración Obama podría ayudar a los dueños de casa cuyas propiedades han bajado en al menos 15%,  al ofrecer nuevos préstamos respaldados por el gobierno y obtener por parte de los emisores de las hipotecas reducciones del préstamo, dice Marc Perton en The Consumerist.

Advierte, sin embargo, que como el programa es voluntario, los inversionistas no tendrán que regirse por él

Cita las preocupaciones de Michael Calhoun, presidente del Centro para Préstamos Responsables, que defiende los intereses de los dueños de vivienda. “Es importante comprender que en su totalidad el programa Making Home Affordable y el sistema de refinanciamiento FHA se basan en incentivos pero carecen de obligaciones: tenemos zanahorias, pero no palos. Si la industria se niega a responder rápidamente a las iniciativas actuales recalcará la necesidad de que se implementen medidas de modificación de préstamos más vigorosas para acelerar la recuperación económica del país”.

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