En las 72 horas después de que los manifestantes en Lafayette Square, se acercaran demasiado a la Casa Blanca, la residencia del presidente Trump se ha transformado en una verdadera fortaleza.
Es quizás la mejor ilustración, real y metafórica, del temor y desprecio que sienten Trump y sus asesores por el Pueblo enardecido y movilizado en repudio al vil y cobarde asesinato de George Floyd.
Desde 1792, cuando se inició la construcción del inmueble con la emblemática dirección 1600 Pennsylvania Avenue, a la residencia del mandatario elegido por el Pueblo se le conoció como la Casa del Pueblo.
Pero hoy día, más parece un palacio monárquico de otras tierras y épocas.
Ahora, la Casa Blanca se esconde detrás de barricadas como una base militar, con múltiples anillos de seguridad, formados por rejas negras que rodean la estructura georgiana de piedra caliza. La alejan del Pueblo y transmite un mensaje contrario a la democracia.
Una democracia violada.
La respuesta de Trump de militarizar a las ciudades para “dominar” las protestas se traduce en vehículos militares por las calles, balas de goma contra manifestantes, gases lacrimógenos. Áreas clausuradas.
Este lunes manifestantes en su mayoría pacíficos fueron expulsados con macanas y gases del Parque Lafayette frente a la Casa Blanca, para que el presidente pudiera tomarse una serie de fotos con una biblia en la mano.
No fue muy bien recibido el evento. También está el creciente aislamiento político del inquilino de la Casa Blanca, que en 3 años y medio en la Oficina Oval es cada día más evidente.
El incidente produjo el rechazo de algunos en las cúpulas del poder militar. James N. Matti, ex secretario de defensa, dijo que era una “burla de nuestra Constitución”.
Hasta el momento, el grueso del partido republicano sigue con Trump. De dientes para afuera. El terror que le tienen es real. Todo detractor es objeto de la ira presidencial, que es igual a la de todo bully.
Este fin de semana se preparan nuevas marchas en la capital. La represión policial sigue sin control en diversas partes del país.
