Cinco miembros del equipo legal de juicio político de Donald Trump se retiraron poco más de una semana antes de que comience el juicio, informa CNN.
Según los informes, el éxodo masivo de último momento se debe a que el expresidente quiso utilizar el juicio para seguir promoviendo sus teorías de conspiración de que las elecciones le fueron “robadas”, con lo cual su equipo legal no estaba de acuerdo, según CNN.
Se dijo que la decisión de Butch Bowers y Deborah Barbier de partir antes del juicio del 9 de febrero fue mutua con el equipo de Trump.
Además de Bowers y Barbier, que se esperaba que fueran los abogados principales en el juicio, otros tres han supuestamente partido, incluidos Josh Howard, Johnny Gasser y Greg Harris.
Comentan que Trump “no era receptivo” a las estrategias establecidas por los miembros del equipo legal. Jason Miller, el exasesor de Trump, al comentar a CNN sobre la reestructuración legal, primero describió el juicio político como “inconstitucional” que es “perjudicial para nuestro país” antes de señalar que aún no se había tomado una “decisión final”.
Otros rumores señalan que el mismo Trump actuará como su abogado, para ahorrarse dinero. Dicen que un acusado que se represente a sí mismo tiene a un imbécil como cliente.
