Para noviembre, lo más seguro es que no le queden uñas al electorado estadounidense: se las tienen que está comiendo de los nervios.
Pasados un debate presidencial (desastroso para Barack Obama) y uno vice presidencial (bastante bueno para Joe Biden), las encuestas indican que la elección sigue muy cerrada.
Según una nueva encuesta por The Washington Post y ABC News ha habido poco movimiento del punto en que se encontraban los candidatos hace dos semanas, cuando se condujo la misma encuesta.
Escriben Dan Balz y Jon Cohen, en el Washington Post, que casi las dos terceras partes de los encuestados afirmó que no necesitan más información antes de la elección.
Escasamente uno de cada ocho no se ha decidido o indica que podría cambiar de opinión, agrega el periódico capitalino.
“Aunque el electorado abrumadoramente percibe que Romney ganó el primer debate, la gran mayoría dijo que su opinión del presidente no cambió como resultado”.
Sin embargo, indica la encuesta, el cambio de actitud hacia Romney fue mayor, especialmente de manera positiva — la gran mayoría siendo los mismos republicanos que ahora se sienten más entusiasmados por su candidato.
Resultado neto para el 15 de octubre, día antes del segundo debate: el 49% de los votantes potenciales encuestados dijo que votarán por el presidente; el 46% por Mitt Romney.
Ilustración cortesía Donkeyhotie via flickr
