Una escena difícil de imaginar: dos sacerdotes católicos retirados se pelearon con tal brutalidad que uno le corto una oreja a otro de un mordizco.

Informa Australia’s News Network que el padre Thomas Byrne de 80 años se agarró a golpes con el padre Thomas Joseph Smith en su complejo de edificios en Perth, Australia.

Según las autoridades, al concluir el altercado, Byrne dijo a Smith que recogiera algo del piso, que era la oreja cortada.

La envolvió en una toalla y la llevó al hospital, donde le fue cosida de nuevo.

Al presentarse en la corte, uno tenía un ojo negro, el otro su oreja recién cosida.

Ahora, dice ANN, bajo orden judicial no pueden estar a menos de 25 metros uno del otro, no se pueden comunicar de ninguna forma, mucho menos amenazarse mutuamente.

Artículo en inglés

Foto cortesía de jesspac via flickr