Primero aseguraron que siempre funcionaban bajo estricta vigilancia de la ley, ahora la National Security Agency (NSA) reconoce que sí, en efecto, nos han estado vigilando a todos sin molestarse a obtener una orden judicial, informa Spencer Ackerman en The Guardian.
El rotativo inglés ha obtenido una carta en la que el director de inteligencia nacional de EUA, James Clapper, lo confirma al Senador Ron Wyden, del comité de inteligencia del senado. ““Ha habido consultas, utilizando identificadores personales de individuos de EUA, de las comunicaciones legalmente adquiridos, para obtener inteligencia extranjera focalizando en personas no estadounidenses de quienes razonablemente se cree fundadamente que se encuentran fuera de EUA“.
Ese lenguaje legal y laberíntico define lo que se llama una “puerta trasera”, que permitió a la NSA recopilar datos de Google, Apple, Yahoo, Facebook y otras grandes compañías de tecnología, sin una orden judicial.
