Todavía no se sabe exactamente qué condujo a un muchacho de 17 años a saltar los 72 metros del puente Golde Gate a la bahía de San Francisco.
El le dijo a un surfista que lo rescató que lo hizo por “la sensación”. Un compañero de clase (porque estaban en una excursión con la escuela) dice que lo hizo por lucir cool frente a sus nuevos compañeros porque acababa de cambiarse a una escuela nueva.
Sin embargo, dice Kevin Fagan en el San Francisco Chronicle las autoridades están investigando el caso como un intento de suicidio. Después de todo, el 99 por ciento de las personas que saltan terminan del otro lado.
en 1937, el puente ha sido el punto de partida para el otro mundo de más de 1,500 personas. Cada año, decenas se tiran, muriendo de lesiones internas masivas y fracturas en el cráneo.
El joven sobrevivió con solo unas magulladuras.
