Regresa al país Strauss-Kahn, en ElMolinoonline.comMientras que en Francia, François Hollande recibía la llaves del Palacio del Eliseo, Dominique Strauss-Kahn, quien solo hace un año era considerado el favorito para ganar la presidencia de esa nación, se limitaba a observar desde lejos.

Tóxico: todos le sacan el cuerpo.

La única referencia al nombre de DSK en la prensa francesa es el anuncio de que había entablado un pleito contra Nafissatou Diallou, la mucama del hotel Sofitel en New York con quien tuvo un encuentro sexual que ella llamó violación, él consensual; fue descartado por la fiscalía, pero marcó el comienzo de fin de la descomposición política del ex director del Fondo Monetario Internacional.

Dice France 24, que DSK pide un millón de dólares de la mucama por “acusaciones falsas” y “defamación”.

Desde que fueron desestimados los cargos criminales en New York, en agosto, Nafissatou Diallo entabló una demanda civil en el Bronx New York.

Strauss-Kahn es un hombre sumamente rico que puede contratar los mejores abogados.

Pero es un hombre venido a menos, artífice de su destino.

La auto destrucción de Dominique Strauss-Kahn fue producto de su arrogante e irresponsable incapacidad de controlar sus apetitos.