VOA Noticias — El alcalde de Los Ángeles Eric Garcetti expandió el martes las protecciones para los inmigrantes que están ilegalmente en el país, enfatizando el rechazo de la ciudad a colaborar con las estrictas medidas migratorias del gobierno del presidente Donald Trump.
Una directriz ejecutiva solicita al jefe de bomberos y a los jefes de las policías aeroportuaria y portuaria que se apeguen a la vieja política del Departamento de Policía de no investigar a los individuos para determinar su estatus migratorio.
Los Ángeles “defiende la inclusión y la tolerancia, y da la bienvenida a todo aquel que busque alcanzar sus sueños y formar aquí su familia, sin importar su nacionalidad o estatus migratorio”, señala la directriz de Garcetti.
Los inmigrantes son el “motor” de la economía de Los Ángeles, y casi dos terceras partes de los residentes son nacidos en el extranjero o hijos de inmigrantes, dijo Garcetti.
La medida prohíbe que cualquier empleado de la ciudad coopere con el ejercicio de las leyes federales de inmigración civil o que permita el uso de fondos o recursos de la ciudad para tal fin, a menos que la ley se lo requiera.
Adicionalmente, los empleados no pueden darle a los agentes federales de inmigración acceso a ninguna instalación de la ciudad, a menos que estén obligados por la ley.
El alcalde de Los Angeles, Eric Garcetti, acompañado del jefe de Policía de la ciudad Charlie Beck, y el concejal Gil Cedillo, defienden la ciudad como refugio en el Día de los Inmigrantes de Los Angeles. Foto: Arturo Martínez, VOA
El alcalde de Los Angeles, Eric Garcetti, acompañado del jefe de Policía de la ciudad Charlie Beck, y el concejal Gil Cedillo, defienden la ciudad como refugio en el Día de los Inmigrantes de Los Angeles. Foto: Arturo Martínez, VOA
El jefe de policía Charlie Beck dijo en conferencia de prensa que en sus cuatro décadas en el Departamento de Policía, los agentes nunca se han involucrado en la vigilancia de las leyes federales de inmigración civil “y nunca lo harán”.
Que los policías actúen como agentes migratorios podría perjudicar la capacidad del Departamento de Policía de Los Ángeles para combatir el crimen y dañaría su relación con los inmigrantes, aseguró Beck.
La relación se daña cuando un agente “toca la puerta para obtener información de un testigo o hablar con una víctima y las personas salen corriendo por la puerta trasera”, comentó Beck. “Y ese es nuestro mayor miedo, de que suceda en nuestra ciudad”.
Trump ha dicho que planea poner fin a las llamadas “ciudades santuario” y a otras jurisdicciones que no cooperan con las autoridades migratorias, y amenazó con retirarles el acceso a algunas subvenciones federales.
El lunes, las autoridades migratorias difundieron una lista de 206 casos de inmigrantes puestos en libertad por agencias públicas “no cooperativas” antes de que los agentes federales pudieran intervenir.
Garcetti dijo que ese reporte intentaba “marcar” a esas agencias y perjudicaría las relaciones entre las autoridades locales y el gobierno federal.
En tanto, Garcetti y decenas de otros alcaldes que participaron en la Conferencia de Alcaldes instaron a Trump y al Congreso a solucionar lo que definieron como un sistema migratorio “fallido”.