Continuidad o cambio fueron las dos opciones para los casi 90 millones de mexicanos convocados a votar el 1 de julio 2018 y una abrumadora mayoría votó a favor de abrir una nueva página.
Un conteo rápido de los sufragios depositados ordenadamente por millones de mexicanos indica que el mensaje anticorrupción de Andrés Manuel López Obrador logró obtener el 53% de los sufragios para darle una contundente victoria sobre los candidatos de los partidos tradicionales.
Fue éste el tercer intento de López Obrador, conocido como AMLO, por la presidencia. Con este fin, hace solo tres años impulsó la formación de la coalición Juntos Haremos Historia formada por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con los partidos del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES).
Con López Obrador gana la izquierda mexicana por primera vez en décadas, dejando hechos trizas a los derechistas partidos tradicionales, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de Acción Nacional (PAN). Los candidatos de estos grupos, igual que el saliente presidente Enrique Peña Nieto han reconocido los resultados electorales.
En su primer discurso como presidente electo, López Obrador llamó “a todos los mexicanos a la reconciliación y a poner por encima de los intereses personales –por legítimos que sean– el interés superior, el interés general”.
Aunque los comicios se celebraron ordenadamente, la violencia ha dejado una marca indeleble en México con los asesinatos de más de cien políticos, entre ellos docenas de candidatos. También han sido ultimados comunicadores, educadores, activistas sociales, líderes comunitarios.
Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, 104 mil 583 mexicanos fueron víctimas de homicidios, superando oficialmente los 102 mil 859 que hubo en el sexenio completo de Felipe Calderón.
La periodista y autora colombiana radicada en México, Margarita Solano, envía la siguiente observación. Mis primeras reflexiones electorales por la presidencia de México:
México está polarizado. La mitad del país no avala a AMLO y el gran reto será cómo lograr la reconciliación nacional.
Las encuestas, falsas o verdaderas, no se equivocaron: AMLO siempre estuvo de primero.
El PRI y el PRD son los grandes perdedores del proceso electoral. El primero tendrá que refundarse y ser oposición durante estos seis años. Pasa de primera a tercera fuerza política nacional. El segundo quizás se extinga.
Éstas elecciones son históricas para México. Por primera vez, gana un partido político que no es de los partidos tradicionales. Llega Morena con tan solo tres años de fundado.
El PAN es el partido más fracturado. Si bien se arraigan como la segunda fuerza política nacional, aliarse con el PRD cobra votos, gran error.
México cambia y castiga con vehemencia.
La comunidad internacional comienza a analizar el significado de estos resultados en la nación más poblada del mundo hispano. Con 132 millones de habitantes, de los cuales 53.4 millones viven bajo condiciones de pobreza, México es la 11ava economía del planeta.
Animal Politico informa que Donald Trump ha felicitado al nuevo primer mandatario de mexicano. “El presidente estadounidense, Donald Trump, felicitó a Andrés Manuel López Obrador por las tendencias de votación que lo ubican como el ganador de la elección presidencial y demostró su interés en trabajar con él para “el beneficio de Estados Unidos y México”.