Buceadores en el puerto de Cesarea en Israel han encontrado un tesoro de la era romana en los restos de una nave que naufragó hace 1,600 años.
Informa Stephanie Pappas en Live Science que estos tesoros fueron en su época desechados como basura y colocados a bordo de un barco para reciclarse. El navío naufragó, con lo cual no llegaron al punto de reciclaje, manteniéndose bajo las aguas, en donde la arena los preservó.
“Como si hubiesen sido fundidos ayer”, dijo un arqueólogo israelí.
Mediante la fecha que aparece en algunas de las monedas se ha podido establecer el período de los objetos. Algunos eran del siglo II, aunque la mayoría era posterior, del siglo IV, indica LiveScience.
Ahora la Autoridad de Antigüedades de Israel ha iniciado un estudio arqueológico para preservar el hallazgo, que incluye lámparas de bronce, la estatua de una ballena, una diosa luna. Las monedas tienen referencias a los emperadores Constantino y Licinio.
Prueba fehaciente de que la basura de unos es un tesoro para otros.
