SCRANTON, PENNSYLVANIA, Abril 21, 2016 — Cuando en medio de su denuncia a las desigualdades sociales y económicas en EUA, desde la audiencia alguien interrumpió a Bernie Sanders diciéndole, “¡Por eso es que te necesitamos a tí!”, el candidato respondió, “Vamos a necesitar mucho más que yo. Un movimiento”.
La necesidad de formar un movimiento de activismo ciudadano fue el mensaje de Bernie Sanders a una audiencia de unas dos mil personas que pacientemente hicieron cola por más de 2 horas en un hermoso día de primavera para ingresar al Centro Cultural del Templo Masónico en esta ciudad del noreaste de Pennsylvania, considerada una parada obligatoria para todo candidato a la presidencia de EUA.
Comenzó su intervención de una hora señalando que “a diferencia de los otros políticos hoy vamos a decir la verdad”. Y, con esas palabras, fue presentando el caso por lo que él llama una “revolución política que regrese el poder político al pueblo”.
Rodeado en el escenario de activistas de diversas edades, el socialista demócrata dijo que desde hace más de 30 años las élites económicas en EUA han venido robando a la clase trabajadora pagándole salarios miserables y negándose a pagar impuestos.
“No tiene sentido”, dijo, que la familia más ricas de EUA, los Walton paguen salarios de hambre a los empleados de Walmart, quienese se ven obligados a usar cupones de alimentos y el seguro Medicaid subvencionados por el los constribuyentes.
“Existe un sistema electoral corrupto que permite a Wall Street y los milmillonarios del país comprar políticos y elecciones”, dijo.
Como muestra del poder de cambio que tiene la gente al organizarse, Bernie Sanders mencionó los avances que se han registrado en las luchas de los trabajadores de los establecimientos de comida rápida por un salario mínimo de US$15.
Hace unos años, cuando alguien mencionó esa cifra, muchos dijeron que “US$15 era imposible, tal vez, US$8 o US$9. Hasta que comenzaron a luchar los empleados de McDonald’s y Burger King, en Seattle, y luego en Los Angeles, y en New York” y ahora es una realidad, que debe extenderse por todo el país.
El Senador se pronunció a favor de los huelguistas de Verizon, presentes con sus camisetas rojas en una sección de la audiencia.
Dijo que desde la infancia hasta la vejez, la sociedad estadounidense está estructurada en contra del trabajador. “No tiene sentido”, repitió, “que a los empleados de las guarderías donde están nuestros niños se les pague una miseria”.
Habló sobre la necesidad de apoyar las escuelas públicas, mejorando la inversión en los programas y pagando decentemente a los educadores.
El senador luego mencionó la muy común situación en que egresados de las universidades entran al mercado laboral agobiados por deudas impagabales de cientos de miles de dólares.
Pidió universidad gratis, señalando que EUA es una de las pocas naciones avanzadas donde ello no existe. “Hace décadas graduarse de segundaria era considerado un importante logro y la nación instituyó la educación pública gratis hasta la segundaria”, dijo. “Ahora un grado universitario es lo que equivalente”.
Denunció los llamados tratados de libre comercio que desde los años 90 han resultado en la exportación a otras naciones de empleos con buenos salarios y prestaciones. El senador produjo una lista de empresas en el área de Scranton que cerraron y se fueron al exterior, llevándose cientos de empleos.
Ello ha enriquecido aún más a las grandes corporaciones, que además encuentran maneras de no pagar impuestos.
Respecto a la salud, Sanders dijo que las reformas implementadas por Barack Obama, y que se conocen como Obamacare, son un logro importante. “Pero quedan millones sin seguro y hay que extender estos beneficios a ellos”. Dijo que la salud debe ser un derecho para todos los ciudadanos del país.
Afirmó, además, que el país tiene una deuda con los veteranos militares. Sanders, en calidad de senador es parte del Comité en Asuntos de Veteranos y conoce de cerca los serios problemas que enfrentan las personas que regresan incapacitados de una u otra forma de las guerras en el exterior.
Críticó el costos de las guerras como la de Irak y la región del medio oriente señalando que los miles de miles de millones debería invertirse en la reconstrucción de puentes, carreteras y la infraestructura del país.
Pidió mayor inversión y empleos en las comunidades afroamericanas. Y denunció el sistema que ha encarcelado a la juventud negra, a la vez que le cierra oportunidades.
Sobre el tema de inmigración, pidió nuevamente que se implemente una reforma migratoria integral que mantenga unidas los 11 millones de personas que viven en EUA sin documentos. (Más tarde, en Readding Pennsylvania, dijo que debería cerrarse el centro de detención familiar Berks. “El gobierno no debería participar en el inhumano negocio de encerrar familias que han huído de una violencia indescriptible ei Honduras, Guatemala, El Salvador y otras naciones del mundo. En vez, deberíamos extender a estas familias la compasión, la dignidad y el respeto que merecen”).
Sanders habló de la deuda que EUA tiene con los americanos nativos, que en sus reservaciones sufren del abandono total y la discriminación.
Contrario a lo que han dicho comentaristas políticos y su rival Hillary Clinton de que todas éstas son buenas ideas solo que no pueden realizarse ya que el país no tiene los recursos para pagar por esto, Sanders dice que es posible al imponer impuestos sobre la especulación de Wall Street y los grandes bancos.
El sistema está corrupto de pies a cabeza y para cambiarlo se requiere una revolución política. Y esto se puede lograr únicamente si el pueblo se involucra en el proceso democrático. “La democracia no es un deporte de espectadores”, dijo. “Necesita la participación de todos ustedes”. Votar por el este martes es solo un paso en un proceso, enfatizó.
En ese sentido el mensaje del Senador Bernie Sanders, un septuagenario socialista demócrata que hace escasamente un año pocos en EUA conocían y los grandes medios corporativos consideraban marginal, está llegando a los oídos de una nueva generación. Ellos piensan en términos de “nosotros” en vez de “mí”. Consideran totalmente necesario involucrarse en el proceso político.
Y este es un paso hacia la revolución política que pide el Senador — un movimiento que va más allá de la victoria por la nominación demócrata, incluso la presidencia de EUA.
https://youtu.be/ZtPIYLHf9uU
