CF Torres
Carlos F. Torres, Director El Molino Online

Una buena guerra nunca termina, dicen los que se enriquecen de la venta de armas.

Solo cambia con el pasar del tiempo.

Tal es el caso con la situación en Gaza, donde la violencia no tiene fin.

Y ahora en Irak, donde ha comenzado una nueva fase de la guerra de EUA contra Irak, que tuvo inicio en 1993 bajo George Bush padre, bajó de intensidad con Bill Clinton, para tornarse en una invasión total en el 2003 al mando de George Bush hijo.

En el 2009 dejó en el poder un gobierno de la minoría chiíta que reprimió a la mayoría sunita, la cual se alió con un grupo de fundamentalistas fortalecidos luchando lado a lado con grupos financiados por EUA y sus aliados contra el gobierno de Siria, y que han establecido un califato llamado llamado Estado Islámico, lanzando una ofensiva para tomarse Irak, atacando inmisericordemente a otros grupos étnicos y religiosos, entre ellos los yazidis, que EUA ha venido a ayudar con bombas y alimentos. 

Según informes, miles de ellos se había refugiado en una montaña y estaban al borde de la muerte de hambre y sed.

Hambre y sed como la que han sufrido los niños en la frontera, noticia que ha sido desplazada a segundos planos, igual que discusión sobre la reforma migratoria que, en ausencia de acción por parte del Congreso, parece cada vez más depender en una medicda presidencial ejecutiva que según los rumores vendrá pronto.

El New York Times pidió hoy en un editorial que actúe en ese sentido.

Daría un ataque de bilis a los derechistas del Tea Party y sus aliados en el congreso que, en ausencia de nuevas acusaciones, están comenzando a vincular a la población indocumentada con el brote de Ebola en Africa occidental, donde las fronteras entre naciones se han cerrado mientras se combate una crisis de salubridad como no se ha visto en décadas.

Con todo ello, siguió el tira y afloje entre la CIA, apoyada por la Casa Blanca, y el comité del Senado que quiere hacer público un informe sobre las torturas por la agencia a presos musulmanes durante el periodo que siguió los ataques terroristas de septiembre 11, 2001.

Y es con este trasfondo que el presidente Obama se marchó de vacaciones a jugar golf con sus amigos multimillonarios en el lugar donde solo van multimillonarios: Martha’s Vineyard.

Mientras tanto, en la Gran Manzana las chinches de cama continuaban tomándose la ciudad, movilizándose ahora en el subway.

Otra semana que pasó en EUA.

Carlos F. Torres
New York, Agosto 10, 2014

Estado Islámico