Nos consuela sabe que no somos los únicos que hemos tenido pésimas ideas.
De hecho, son tantísimas, que hay un sitio que se dedica exclusivamente a venderlas.
Venden malas ideas a precio de ganga.
Otras sencillamente las regalan a quien se apunte como socio, escribe Sam Biddle en ValleyWag de Gawker.
La página es SideProjectors y allí los visitantes pueden revires proyectos, empresas, ideas y en algunos casos pagar por ellos lo que lleven en el bolsillo.
El de adelante.
Por ejemplo, está TuneJet, “Es un servicio web basado en (HTML5) de alimentación de música que funciona prácticamente en cualquier sitio y es una magnífica alternativa a iTunes en los dispositivos iOS devices”: 80 dolaretes.
O Winestagram, que puede ser suyo por 10 dolaretes: “Una vez que usted y sus amistades descorchen una botella de vino, tome una foto de la reunión. Suba la foto a Winestagram y le enviaremos un código simple. Escriba el código en el corcho, y guárdelo como recuerdo…puede usarlo para encontrar su foto en el futuro”.
La palabra SideProjectors refiere precisamente a que son proyectos laterales, es decir los genios creadores tienen otras maneras de ganarse el pan de cada día.
Porque estas ideas no les dieron ni para un desayuno.
Al menos no somos los ventiúnicos.
Foto cortesía Kyle May vía flickr
