En el punto más frío del planeta, equipos de científicos rusos perforaron a una profundidad de casi 4 kilómetros por debajo de la superficie hasta alcanzar el lago Vostok que pudo haber permanecido cubierto por millones de años, según informa Actualidad RT.
Dice que la perforación tomó casi 30 años, trabajando bajo temperaturas hasta de 89 grados bajo cero hasta el punto que imposibilitaba el aterrizaje de aviones.
Encabezó la misión Valery Lukin, hidrobiólogo, subdirector del Instituto de Investigaciones Árticas y Antárticas.
Explica Actualidad RT que el lago Vostok es uno entre cientos de lagos antárticos sellados bajo kilómetros de hielo durante 15 a 34 millones de años y podría ser la reserva de agua dulce más antigua del planeta.
Su hallazgo en 1959 fue el descubrimiento geográfico más importante del siglo XX, dice.
Algunos científicos advierten que esta excavación podría causar más mal que bien, al traer a la superficie microorganismos que resulten dañinos para los seres humanos.
Sin embargo, Valery Lukin descarta este peligro.
