El hielo en el Océano Artico se encogió durante el mes de agosto y siguió encogiéndose durante 20 días batiendo un récord mundial, informa Jason Samenow en el Washington Post.

Dice que, afortunadamente, desde el 16 de septiembre las aguas han comenzado a congelarse.

En su punto más crítico, señala, 1.32 millones de millas cuadradas se habían derretido, lo cual es casi 300,000 más que en el 2007.

El hielo se fue derritiendo a velocidades superiores a las que esperaban.

Además, agrega, el hielo está perdiendo grosor.

Uno de los efectos de este fenómeno hasta el momento desconocido podría ser un invierno muy severo.

Artículo en inglés

Foto NASA via WP