Con un reportaje sobre la pobreza en Arkansas, estado que envío a su padre a la Casa Blanca, Chelsea Clinton hizo su debut como reportera de la cadena NBC.
Tuvo su primer segmento en el programa Rock Center, del presentador Brian Williams.
Los ojos del país la siguieron.
Howard Kurtz, comentarista mediatico en Daily Beast, dice que el segmento tuvo un elemento controlado, como de guión.
Cuando Williams le preguntó, en efecto, ¿por qué ella estaba saliendo al público, Clinton dijo: “Durante la mayoría de mi vida, opté deliberadamente por una vida privada, mientras que sin querer llevé una vida pública”, casi las mismas palabras que usó en su única entrevista con el New York Times.
Sin embargo, señala Kurtz que si, “Logra relajarse un poco, podría tener un buen puesto”.
Pero no todos fueron tan generosos. Hank Stuever del Washington Post fue bastante severo. “Lo que más sorprendió en el programa del lunes por la noche fue ver cómo alguien aparece en la TV en una manera tan prominente y, en su momento grande, muestra tan poca carisma: es decir ninguna”.
Dijo que es, “Una de las personas más aburridas de su época”.
La revista Politico no fue algo menos agresivo. Dijo que tenía “una buena presencia, aunque lucía algo nerviosa”.
Nos llamó la atención el parecido con su madre.
Tranquila Chelsea: no es fácil seguir los pasos de tan famosos padres.
Foto cortesía nataliemaynor via flickr
