En lo que sin duda le arruinó éste y muchos otros fines de semana al presidente Barack Obama, por primera vez en la historia, la deuda de EUA ha sido degradada.
La agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s rebajó el 5 de agosto la calificación de la deuda de EUA bajándola de AAA, la máxima posible, a un escalón menos AA+.
“La rebaja está motivada porque la consolidación fiscal acordada por el Congreso y la Administración se queda corta de lo que sería necesaria para estabilizar la dinámica de deuda a medio plazo del Gobierno”, dijo Standard & Poor’s en un comunicado.
Standard & Poor’s había advertido que esa medida estaba en el porvenir durante las recientes negociaciones en el Congreso estadounidense sobre el techo de la deuda y la posible suspensión de pagos.
“Más ampliamente, la rebaja refleja nuestra visión de que la efectividad, estabilidad y previsibilidad de los legisladores e instituciones políticas de EUA se han debilitado en un tiempo de desafíos fiscales y económicos a un grado mayor que lo que habíamos previsto cuando le asignamos una perspectiva negativa”, agregó Standard & Poor’s.
Ya el pasado 15 de julio Standard & Poors había colocado la deuda estadounidense “bajo vigilancia con perspectiva negativa”, indicando que existía un 50 por ciento de posibilidades de que la degradara en los próximos tres meses.
La decisión de Standard & Poors se produce después de que otras grandes agencias como Moodys y Fitch anunciaran esta semana que mantenían su clasificación de”AAA” para la deuda de EUA.
Standard & Poor’s agregó que, “Podríamos rebajar la calificación a AA dentro de los próximos dos años si vemos que hay una menor rebaja en el gasto de lo acordado, mayores tipos de interés, o nuevas presiones fiscales durante el periodo que puedan resultar en una trayectoria general de deuda más alta de lo que actualmente consideramos”.
Esto no se cura ni con Alka Seltzer.
