Los combatientes musulmanes del Estado Islámico han comenzado a implementar nuevas tácticas para sobrevivir las bombas que desde el 8 de agosto EUA viene lanzando contra ellos en Siria e Irak.
Según indica una nota de Kristina Wong en The Hill, esto significa que es más difícil para la aviación de EUA encontrarlos.
El Mayor General Jeffrey Harrigian, del estado mayor, dijo que si bien antes los combatientes se movilizaban en convoys con sus banderas, ahora se han dispersado.
Ello podría pregonar la necesidad de enviar tropas terrestres de apoyo, algo que inicialmente se dijo no iba a suceder, pero que se discute con creciente frencuencia y un sentido de inevitabilidad.
El general también dijo que es difícil establecer el número de víctimas civiles causadas por la campaña de bombas y misiles.
Desde el 8 de agosto, dijo el general, han tenido lugar más de 240 ataques estadounidenses a objetivos en Irak y en Siria.
La fuerza aérea ha volado más de 3,800 misiones y se han realizado más de 700 vuelos de inteligencia.
Esta es la primera vez que la aviación de EUA usa los F-22, indica una nota en Time, que agrega que la aviación de estadounidense escasamente podía controlar las ganas de usar los poderosos aviones que a un costo de US$350 millones c/u están listos desde el 2005.
Imagen F-22 Wikipedia Commons
