Inicialmente, Ray Rice había sido suspendido por dos juegos por golpear a su esposa, que en aquel entonces era su novia.
Pero cuando TMZ, publicó el video en el ascensor que muestra al footbolista dándole un golpe terrible que noquea a la joven, solo tardaron 10 horas y algunos minutos para que el jugador se quedara sin puesto.
Su equipo, los Baltimore Ravens, perderán millones.
Las tiendas de la NFL han dejado de vender la camiseta de Rice.
El Baltimore Sun dice que las imágenes lo cambiaron todo.
Siguen pendientes demasiadas preguntas que indican que los capos de la NFL no quisieron saber más sobre el tema.
Robert Silverman, en Daily Beast, asegura que se trata de un escándalo de “proporciones nixonianas”. “La preguntas va a ser, ¿que sabía el comisionado Roger Goodell y cuando lo supo? ¿Por qué no intentó la NFL ver el vídeo antes? “Aquí no vemos moral sino un intento de controlar los daños”.
“Lo que importa es el hecho. No debió ser necesario otro video para que actuara la NFL” escribe Juliet Macur en el New York Times.
dice Ann Killion en el San Francisco Chronicle dice que Roger Goodell debería sufrir el mismo castigo que Rice. “Su liderazgo carece de integridad y el público no puede confiar en él: Debería renunciar”,
En otro video, presuntamente más claro, según la AP cuando Rice sacaba del ascensor e a Janay Palmer inconsciente, él dijo “Está borracha, ¿verdad? Sin policías”.
Politico cita una declaración de la Casa Blanca. “El presidente es el padre de dos hijas. Y como todo estadounidense, cree que la violencia doméstica es depreciable y no debe ser aceptada en una sociedad civilizada. Pegarle a una mujer no es algo que haga un verdadero hombre ya suceda en público o en privado”.
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Foto: Wikipedia Commons
