tmnuivmsxua2opt8ubcuEn Ontario, Canadá, las autoridades cerraron la fiesta de un adolescente de 17 años en la casa que sus padres estaban construyendo, cuando llegaron más de 2,000 jóvenes algunos en buses alquilados para llevarlos. Fue organizada por redes sociales bajo el hashtag #MansionParty. Causaron daños por US$70,000 aunque la madre del anfitrión admitió que “dije a mi hijo que podía invitar a unos amigos”.

Gracias: Kelly Conaboy, Gawker