Emails que han surgido como parte de la investigación del escándalo de abuso sexual a menores en el equipo de football de Penn State, prueban de que el papel del fallecido entrenador Joe Paterno en encubrir las acciones de Jerry Sandusky es mucho más extenso de lo que se había informado originalmente, escribe Buzz Bissinger en Daily Beast.
Jerry Sandusky se encuentra preso tras haber sido declarado culpable de 45 cargos de abuso sexual contra menores de edad.
Estas comunicaciones, dice Bissinger, descubiertas como parte de la investigación que encabeza el antiguo director del FBI Louis Freeh, empañan aún más la reputación de Paterno.
Dice que luego de que un entrenador asistente encontrara a Sandusky violando a un niño en un baño de los camerinos, Joe Paterno debió y pudo haber detenido los abusos con solo informar a las autoridades.
Pero él no lo hizo, dice.
Lo único que Paterno hizo fue advertirle a Sandusky, su colaborador por más de 30 años, no podía llevar más “invitados” al estadio de la universidad. “Claro está que fue algo que no se pudo implementar […] con lo cual siguió abusando a los niños durante seis años más”.
Las comunicaciones por email, dice Bussinger, que le fueron leídas (no entregadas) a CNN “indican convincentemente que Paterno fue clave en la decisión de los funcionarios de Penn State de no reportar las acusaciones contra Sandusky al Departamento de Bienestar Social de Pennsylvania”.
Bussinger pinta una situación en que los valores estaban completamente tergiversados, poniendo el football por encima de todo. “Sandusky no era una crisis: un equipo de football con 5 victorias contra 7 derrotas la temporada pasada sí lo era. Lo que le había sucedido a un niño de 10 años no era una tragedia; perder ante Toledo jugando en casa en un partido transmitido por todo el país sí era una tragedia”.
Joe Paterno tuvo la fortuna de haber muerto a los 85 años en enero, dice Bussinger.
Tales son las dimensiones de estas comunicaciones.
