ATLANTA, EUA — Siempre que hay una crimen policial, funcionarios políticos, comentaristas, la gente que influye en las opiniones usa la analogía de una manzana mala entre muchas.

Pero, ¿y si todas las manzanas están podridas? ¿No será mejor cambiar de fruta?

Aquí sucedió lo de siempre: Policías blancos mataron a Rayshard Brooks, un hombre negro de 27 años, quien estaba desarmado. Le dispararon por la espalda y cegaron otra vida más. 

La comunidad se encendió en indignación, muchos se lanzaron a las calles, ocupando vias, quemando el restaurante donde tuvo lugar el crimen.

Esta vez hubo renuncias en la policía — la jefa se ha ido — y así están las cosas. 

La versión, según informa CNN, es que la policía respondió a una llamada el viernes por la noche de un hombre que dormía en un vehículo estacionado en el carril de acceso del restaurante.

Cuando llegaron, los agentes le hiceron a Brooks una prueba de sobriedad, que él no pasó. Resistió al arresto, luchó con los oficiales y agarró el Táser de uno. Tuvo lugar un altercado, Brooks se soltó de los policías y huyó.

En un momento, según un video que me niego a publicar, parece descargar desde lejos la electricidad del Táser contra los agentes, quienes le disparan con bala y lo mataron. 

Un táser no mata. Mucho menos a la distancia en que se encontraba. 

Pero los balazos sí.

Fue otra muerte innecesaria. 

No preguntamos por qué, porque la respuesta es la de siempre. Por el racismo sistémico en EUA — porque la ideología de la policía (blancos en su gran mayoría) es similar a la de un ejército de ocupación y cualquier falta de obediencia por parte de las comunidades negra y latina trae draconianass consecuencias. 

Las autoridades van a decir que fue un error. 

Un abuso. 

Que el agente estaba bajo estrés. que era la “manzana mala”. 

Porque eso es lo que siempre dicen. Tanto en la muerte de George Floyd, en Minneapolis, o Breonna Taylor, en Louisville, o la de Ahmad Aubry, también en Georgia, siempre dicen lo mismo. (Solo en estos días — si se cuentan todas son miles).

Una manzana podrida. “No hay que perder de vista que hay muchas manzanas buenas”, dicen los apológos del sistema policial de EUA, que está basado en proteger los privilegios de pocos por todos los medios necesarios, incluyendo la tortura y los asesinatos de los pobres, los negros, los latinos.

Lo que preguntamos un creciente número de personas en EUA — país en donde pagamos impuestos, criamos familias, contribuímos como ciudadanos de bien — es si esta cesta de manzanas tiene tantas podridas, no será mejor cambiar de fruta?

Hay que escuchar el clamor por suspender el financiamiento policíal.

La realidad sustenta el argumento.

Que los políticos expliquen por qué no debe  tomarse esta drástica medida. 

CFT, Director El Molino Online
Atlanta, GA, 
6/14/2020