Screen Shot 2014-03-03 at 8.04.20 AMEl 27 de febrero la revista Essence honró a Lupita Nyong’o en un evento en Beverly Hills Hotel.

La joven actriz, a solo días antes de ganar el premio Oscar por a la mejor actriz de reparto habló en un tono sincero, personal sobre un problema que la aquejó durante su juventud: el color de su piel.

Jessica Herndon de la Associated Press escribe sobre el discurso de la talentosa joven actriz.

“Se burlaban de mi y me molestaban por el color de mi piel. Mi única oración a Dios era despertarme con la piel más clara. Cuando llegaba la mañana, yo estaba tan emocionada por ver a mi nueva piel que me negaba a mirar hacia abajo esperando hasta estar en frente del espejo, porque quería primero verme la cara. Pero cada día sentía decepción de ser tan oscura como el día anterior”.

Nyong’o dijo que trató de negociar con Dios prometiendo cosas como dejar de comer cubos de azúcar y no perder nunca más su suéter en la escuela de nuevo, si solo pudiera ver un cambio en su piel.

No fue hasta que descubrió la supermodelo británica sudanesa Alek Wek que empezó a creer en su propia belleza, dice la AP.

“Era era tan oscura como la noche y estaba en todas las revistas y pasarelas. Mi color siempre había sido un obstáculo que debía superar. No podía creer que la gente estuviera aceptando y considerara bella a una mujer que se parecía tanto a mí. Era desconcertante y quería rechazarlo porque yo había empezado a disfrutar de la seducción de la insuficiencia. Pero una flor no pudo dejar de florecer dentro de mí”.

Según el informe de la Associated Press, no quedó un ojo seco al escuchar a la joven actriz.

Artículo en inglés

 

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