Luce revolucionario porque lo es.
Su tecnología le permite superar las 1,350 millas por hora que lograba el Concorde.
Es de la familia de naves “scramjet” y según Mark Prigg en Mailonline mañana realizará una importante prueba sobre el Océano Pacífico.
Despegará de su base en el desierto de Mojave en California en el ala de un bombardero B52, el cual lo dejará libre a unos 50,000 pies de altura para que caiga durante cuatro segundos antes de que arranque su propulsor y vuelve durante 30 segundos, para luego caer en el Pacífico.
Será lo máximo que ha volado el aparato, dice.
La totalidad de la misión será de unos 300 segundos, explica.
Los scramjets son naves que “respiran”, porque en vez de cargar tanto el combustible como el oxígeno necesario para su aceleración, llevan únicamente hidrógeno y extraen de la atmósfera el oxígeno necesario.
Podría alcanzar velocidades de Mach6 (unas 4,500 millas la hora) en segundos
El proyecto WaveRider, está dirigido por el Pentágono y la NASA, con objetivos militares. Su costo estimado es de US$140 millones, apunta.
Vuelos experimentales de vehículos WaveRider previos han tenido malos resultados, dice.
