BOGOTA. Por Luis Fernando Parra. Especial para El Molino.En medio de fuertes medidas de seguridad, y con la asistencia de Presidentes y delegaciones de cerca de 80 países, asume como nuevo Presidente de Colombia Juan Manuel Santos, en reemplazo del popular y polémico Álvaro Uribe.
Santos, hombre preparado e hijo de la clase política y tradicional colombiana, recibe un mandato con gran aceptación popular, control absoluto del Congreso y parte de la prensa, hereda un país aún afectado por la violencia, mala distribución de la riqueza y con serias dificultades con sus vecinos: Venezuela y Ecuador.
Entre los grandes retos que se plantea el nuevo gobierno figuran, además del restablecimiento de relaciones diplomáticas con Venezuela, cuyo Presidente Hugo Chávez ha sido recientemente demandado ante la Corte Penal Internacional por el abogado del presidente saliente Álvaro Uribe, el retorno a la transparencia en la gestión pública, el respeto por la independencia y las decisiones de las Altas Cortes, una mejora en las condiciones de vida de los colombianos y el cuidado de los derechos humanos, asunto éste para el que ha impartido ya instrucciones precisas: cero tolerancia contra su violación.
Amanecerá y veremos