Se les acusó de haber matado a 1.7 millones de personas, los juzgó un tribunal que les dio el derecho de defenderse que ellos le habían negado a sus víctimas durante la década de 1970, ahora se les declaró culpables y Nuo Chea, de 88 años, y Khieu Samphan, pasarán el resto de sus vidas tras rejas.
Han sido condenados por crímenes contra la humanidad bajo las banderas del Khmer Rouge, informan Thomas Fuller y Julia Wallace en el New York Times.
Así, demasiado tarde en opinión de muchos, Cambodia intenta sobrevivir uno de los grandes crímenes del siglo 20.
Foto cortesía Shankar S via flickr