Edificio congreso EUALa hora de la verdad, para el Partido Demócrata se acerca a pasos agigantados y, de creer las encuestas, al despertar el miércoles 5 de noviembre, EUA tendrá un nuevo Senado, controlado por los republicanos.

Carlos F. Torres
Carlos F. Torres, Director El Molino Online

Sin embargo, como en previas elecciones, se prevé que la voluntad de la urnas será cuestionada en los tribunales. Y ya se preparan los abogados.

Unicamente para el Senado, la campaña ha pautado casi un millón de anuncios, con lo que muy probablemente el público reaccionará con ‘Demócratas o republicanos, gracias a Dios esta vaina terminó”.

Así podrá el país preocuparse con la economía, que aunque mejora no convence.

También podrán asustarse –porque todos bien saben que la normalidad en EUA es el temor — con el Ebola, cuyas víctimas ya oscilan alrededor de los 5,000 fallecimientos en Africa.

Para agregar su granito de histeria, algunos políticos ha castigado con cuarentenas (innecesarias dicen los entendidos) a los que se han ofrecido como voluntarios para ayudar en Africa. Tal fue el caso de la enfermera Kaci Hickox  que desde que regresó de Sierra Leone valientemente ha combatido gobernadores que quieren ponerla en cuarentena, así no tenga ningún síntoma.

Por otro lado, se discutió qué medidas tomará Obama respecto a su gabinete, donde según una nota en primera plana de New York Times se ha cometido una serie de meteduras de patas — desde la respuesta al Estado Islámico, que sigue avanzando así lo lleven bombardeando durante más de un mes, hasta la la crisis del Ebola, la situación en Siria y las relaciones con China.

En el campo de lo real maravilloso, un accidente de Virgin Galactic demorará las salidas a un paseo por el espacio de las personas que pueden pagar alrededor de US$250,000 por boleto.

Finalmente, con el trajín y el ajetreo de la elección, alrededor de 11 millones de personas y sus familias, esperan a ver si Obama cumple su promesa de aliviar deportaciones; y si la cumple que tan amplia será la medida.

Otra semana que pasó en EUA

Carlos F. Torres
New York, Noviembre 2, 2014