Implacable en el cuadrilátero, pero dócil en la habitación, y un mentiroso completo dispuesto a destruir a una persona que había tomado unas fotos delatorias.
Eso es lo que deducimos de la confesión de Oscar De la Hoya a la cadena de Univisión donde afirma que sí, en efecto, es él el quien había posado en esas fotos fetichistas.
Dice el ex campeón con 45 peleas, 39 victorias, 30 de ellas por KO, que estuvo adicto al alcohol y la cocaína.
Según The Smoking Gun De La Hoya en el 2007 negó ser él, usando un poderoso equipo de profesionales para destruir la credibilidad de Milana Dravnel la joven estriper de 23 años con quien había posado.
Dravnel, quien durante 8 meses tuvo un romance con el pegador, había tratado de vender las fotos.
El equipo de defensa de De La Hoya dijo que era una falsificación total, habían super impuesto la cabeza de sobre otros cuerpos.
“Estoy cansado de mentir, mentir a la gente, mentir a mi mismo”, dijo ahora en su confesión.
