Treinta y seis personas, entre ellas un niño de 12 años, fueron detenidos por las autoridades de Hong Kong luego de fuertes enfrentamientos callejeros entre manifestantes antigubernamentales y las autoridades que usaron un cañón de agua, gases lacrimógenos y dispararon al aire en señal de advertencia al cielo, informa Reuters.
Los últimos acontecimientos muestran que lo que comenzó hace 12 semanas como manifestaciones contra un proyecto de ley que proponía extraditar a China continental a los residentes de Hong Kong ha escalado a una movilización en defensa del alto grado de autonomía que han tenido los residentes de Hong Kong desde que Gran Bretaña devolvió a China la antigua colonia en 1997.
La violencia empleada por las autoridades chinas recuerda la brutal represión de la plaza Tianamen en 1989, que horrorizó al mundo, cobrando un saldo de cientos de muertos (o más ya que las cifras son secretas) y miles de heridos.
Después de la paz relativa de las 2 semanas pasadas, la violencia regresó el fin de semana marcada por violencia entre la policía y los miles de manifestantes que se sumaron a las protestas no obstante las advertencias de las autoridades.
Agrega la nota de Reuters que los enfrentamientos del domingo hasta el momento han sido los más intensos con manifestantes lanzando ladrillos y bombas de gasolina a las fuerzas de seguridad, según Reuters. El disparo de advertencia de la policía fue la primera vez que se utilizó un arma durante las protestas.
En un momento, los oficiales apuntaron con sus armas a los manifestantes y reporteros, indica un video publicado por Jeffie Lam, del South China Morning Post. Se disparó un tiro al cielo.
JUST HAPPENED: officers had pointed their guns at protesters and reporters. Some protesters had earlier threw projectiles at them #tsuenwan #hongkongprotests pic.twitter.com/paosHE0tfA
— Jeffie Lam (@jeffielam) August 25, 2019
Cañones de agua tampoco se habían disparado contra protestas antigubernamentales durante años, pero la policía lo usó brevemente el domingo para obligar a los manifestantes a dispersarse, según Reuters.
Contrastan los enfrentamientos con la manifestación pacífica del pasado fin de semana, cuando alrededor de 1,7 millones salieron al centro de la ciudad. La dirigente de Hong Kong, Carrie Lam, dijo que comenzaría a trabajar con la comunidad para encontrar una solución a la crisis en la antigua colonia británica.
El viernes por la noche, miles de hongkoneses formaron una cadena humana, pidiendo paz y democracia. Las autoridades, sin embargo, dispararon gases lacrimógenos, a los cuales los manifestantes respondieron lanzando botellas, ladrillos, piedras y bombas de gas, según el New York Times.
Usaron varas de bambú para barricar una estación de policía, mientras que algunos se enfrentaron a los oficiales directamente, indica el NYT. Explotó un pequeño petardo incendiarios, y los manifestantes derribaron postes de la luz los que, según afirman, se usaban para vigilarlos.
Beijing Tank-man 1989 became Hong Kong Pistol-man 2019.
A Hong Kong man faced up to a police revolver demanding officer not to shoot protesters. pic.twitter.com/8tw2LAEmea— Joshua Wong 黃之鋒 (@joshuawongcf) August 26, 2019
