¡Ave María Purísima!
Informa Philip Pullella de la Reuters que el mayordomo papal detenido la semana pasada por fugas de documentos secretos del Vaticano podría ser sólo el “chivo espiatorio” que recibiendo la información de un cardenal hasta el momento no ha sido indentificado.
El sábado, Paolo Gabriele, de 46 años, del equipo personal de servicio del Papa Benedicto XVI, fue acusado formalmente de haber robado documentos confidenciales del Papa.
Los documentos filtrados a periodistas italianos acusan al Vaticano de amiguismo y corrupción en los contratos con las empresas italianas, dice la Reuters.
Diarios italianos han señalado que las fugas de información buscan ayudar al papa a erradicar esta corrupción.
Agrega la Reuters que parece existir una lucha de poder entre la Secretaría de Estado, encabezada por el cardenal Tarcisio Bertone, el poderosa hombre de confianza del papa, y sus enemigos, en lo “que recuerda a las conspiraciones en el Vaticano durante la época del Renacimiento “.
El escándalo se viene cocinando por meses, agrega, “pero desde que salió a la luz ha sacudido el corazón de la Iglesia Católica Romana”.
