Fuente: Al Jazeera — Mientras que los informes en torno a la muerte de Muammar Gaddafi siguen siendo contradictorios, relatos de testigos cuentan una historia dramática del enfrentamiento final del derrocado líder libio.
Poco antes de las oraciones del amanecer del jueves, Gaddafi, rodeado por una docena de guardaespaldas y sus partidarios, acompañado por Abu Bakr Yunis Jabr, el jefe de su ejército ya derrotado, salió de Sirte, donde sus partidarios habían participado en cruentos enfrentamientos armados con combatientes rebeldes del NTC para dos meses.
Gaddafi se dirigió al oeste, en un convoy armado de 15 camiones, pero no llegaron muy lejos. La OTAN dijo que uno de sus aviones golpeó el convoy cerca de Sirte a las 8:30 de la mañana del jueves.
Gerard Longuet, ministro de Defensa francés, confirmó más tarde que el ataque – que destruyó todos los 15 camiones y mató a 50 de los hombres de Gaddafi – fue ejecutado por la fuerza aérea francesa.
Sin embargo, el propio Gaddafi y un puñado de sus hombres escaparon a la muerte y parece que han corrido a través de una cadena de los árboles hacia la carretera principal y se escondió en dos tuberías de desagüe.
Gaddafi y sus hombres trataron de esconderse de una unidad de combatientes de NTC que venía siguiendo el convoy, pero fueron localizados rápidamente.
“Al principio les dispararon con armas de fuego antiaéreo, pero no sirvió de nada”, dijo Salem Bakeer, un miembro de la unidad de los combatientes de NTC,. “Entonces nos fuimos a pie”.
“Uno de los hombres de Gadafi salió agitando su rifle en el aire y gritando ‘entrega’, pero tan pronto como me vio comenzó a dispararme”, dijo a la agencia Reuters.
“Entonces creo que Gaddafi debe haber dicho que parara. ‘Mi jefe está aquí, mi jefe está aquí'” dijo “Muammar Gaddafi está aquí y está herido “, dijo Bakeer.
“Entramos y sacamos a Gaddafi. Él decía ‘¿Qué pasa? ¿Qué pasa? ¿Qué está pasando?’. Luego lo pusieron en el auto”, dijo Bakeer.
En el momento de la captura, Gaddafi estaba herido con disparos en las piernas y la espalda, Bakeer dijo.
Otros combatientes del gobierno que dijeron que participaron en la captura de Gadafi, confirmaron por separado la versión de Bakeer, aunque uno dijo que el hombre que gobernó Libia hace 42 años fue herido de bala en el último minuto por uno de sus propios hombres.
“Uno de los guardias de Muammar Gaddafi le disparó en el pecho”, dijo Omran Jouma Shawan.
Videos de aficionados subidos en YouTube parecían corroborarque Gadafi fue capturado vivo.
En el video, un ensangrentado y aturdido Gaddafi puede ser visto apuntalada por dos guardas NTC, que lo agarran y con alegría gritan “Dios es grande!”
Después de su captura, Gaddafi fue colocado en una ambulancia con destino a la ciudad de Misrata. Los testigos dicen que sucumbió a sus heridas, mientras iba en camino.
Sin embargo, el Primer Ministro Mahmoud Jibril dijo en una conferencia de prensa el jueves que Gaddafi no estaba herido fatalmente cuando fue colocado en la ambulancia, pero murió cuando estalló fuego cruzado al transportarlo en la ambulancia.
“Gadafi fue sacado de una tubería de aguas negras … no se presentó ninguna resistencia. Cuando empezamos a moverlo fue golpeado por una bala en su brazo derecho y cuando lo montaron en un camión no tenía otras lesiones ‘”, dijo Jibril.
“El coche fue atrapado en fuego cruzado entre los revolucionarios y las fuerzas de Gaddafi y fue alcanzado por una bala en la cabeza.
“El médico forense no podría decir si lo mató fuego de revolucionarios o de las fuerzas de Gadafi”.
Jibril dijo que Gadafi murió unos minutos antes de llegar a un hospital.
Aunque no está claro lo que sucedió después, otro video amateur, presuntamente grabado por un luchador del NTC, muestra a Gaddafi sin vida arrastraba por el suelo y tirado por una multitud de combatientes para ver.
El cadáver de Gaddafi fue cargado más tarde en un camión y llevado a un lugar no revelado.
“Cuerpo de Gadafi está con nuestra unidad en un automóvil y estamos tomando el cuerpo a un lugar secreto por razones de seguridad”, dijo Mohamed Abdel Kafi, un funcionario de la NTC en la ciudad de Misrata.
La ironía final de la vida de Gadafi, que estaba lleno de anécdotas excéntricas y con frecuencia irónicas, no pasó desapercibido para los combatientes victoriosos, que Gaddafi había denunciado a menudo como “ratas”.
“Él nos llamó ratas, pero mira donde lo encontramos”, dijo Ahmed al-Sahati, un luchador de 27 años de edad, de pie junto a un tubo de drenaje donde se encontró el ex líder.
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