Mitt Romney aparentemente ganó por un estrechísimo margen sobre Rick Santorum en el estado clave de Ohio, pero este último se llevó varios de los 10 estados en juego este “Super Tuesday” en que nada se concretó.
Romney ganó en el despoblado y conservador estado de Idaho en el oeste.
Luego, mantuvo el país a la expectativa hasta entrada la medianoche para superar a Santorum por 38 a 37 por ciento, en una elección en que se depositaron 1.24 millones de sufragios. Con el 99 de los votos contados, Romney llevaba una ventaja mínima: 450,543 a 438,515, según cifras publicadas por Daily Beast.
También, Romney se llevó, Vermont, Virgina, Massachussets e Idaho.
Romney goza del apoyo de conocidos líderes republicanos, pero las bases lo siguen rechazando.
Santorum ganó Dakota del Norte, Oklahoma, Tennessee y los Caucus de North Dakota. Además del magnífico resultado en Ohio.
Newt Gingrich barrió en Georgia, estado que le envió al congreso en los años 80 y donde había invertido la gran mayoría de sus esfuerzos, como parte de su llamada estrategia sureña. La semana entrante va para Alabama, Mississipi y Louisiana, donde espera buenos resultados.
De esta manera, lo que muchos consideraban el peor escenario para los republicanos se realizó este “Super Tuesday” al no dar definición a una campaña que se ha prolongado excesivamente.
¿Qué significa todo esto?
A estas alturas el total de delegados no es tan importante: lo que ha quedado con cristalina claridad es que hasta el momento no hay un candidato republicano con un mandato claro de su partido.
Significa que la campaña se prolongará quizás hasta la convención republicana en julio — espectáculo que ya ha batido los récords por su falta de ideas novedosas y tono alevoso. Con meses por delante y millones de dólares, la indecisión puede prolongarse.
Significa también que para lograr la nominación, Romney tendrá que someter su campaña a una exhaustiva revisión, determinar el problema fundamental que le ha impedido convencer a la mayor parte del electorado y tomar medidas drásticas para rectificarlo.
Si es que puede.
O si no, los otros elefantes tendrán que ver en donde buscar otro camarada.
