ACTUALIZACIÓN- VIERNES 20 de ENERO – MADRID – La vicepresidenta del Gobierno de España, Soraya Sáenz de Santamaría ha declarado en la tradicional conferencia de prensa de los viernes, después del Consejo de Ministros, que Mario Vargas Llosa ha declinado la invitación del Gobierno de España de hacerse cargo de la dirección del Instituto Cervantes. El Premio Nobel ha dicho que “agradece la propuesta y está dispuesto a colaborar con el Cervantes en lo que pueda”, pero que en este momento su carrera literaria le impide ahora mismo hacerse cargo del Instituto Cervantes”, aseguró. Vargas Llosa continuará, no obstante, perteneciendo al patronato de la Institución.
El Gobierno español ha propuesto al escritor de origen peruano Mario Vargas Llosa, Premio Nobel de Literatura, la presidencia del Instituto Cervantes, según han informado fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores al rotativo ABC.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, propuso el nombre del premio Nobel de Literatura a José Ignacio Wert, titular del departamento de Educación, Cultura y Deporte.
El ejecutivo se encuentra ahora a la espera de la respuesta de Mario Vargas Llosa, que tiene la nacionalidad española desde 1993. El escritor se encuentra en estos momentos terminando una nueva obra que versa sobre la banalidad de la cultura en la era de Internet y que prevé publicar esta primavera.
Conviene recordar que José María Aznar, cuando era presidente del gobierno de España, ya le ofreció el cargo de director de Cervantes a Vargas Llosa, ofrecimiento que éste rechazó. De aceptar ahora, el nombramiento pasaría al Consejo de Ministros del próximo viernes.
En cualquier caso, Mario Vargas Llosa ocuparía la presidencia del Cervantes, lo que obligaría a una completa remodelación en la institución dependiente del Ministerio de Exteriores.
Carmen Caffarel es la actual directora del Instituto Cervantes y ocupa el cargo desde 2007.
En el caso de que el autor de ‘La fiesta del chivo’ aceptara esta oferta, escribe Jesús Ruiz Mantilla, de El País, su figura sería de un gran peso institucional y también simbólico: un rasgo cercano a lo que podría ser un gran embajador del español en el mundo desde el punto de vista no solo lingüístico, sino también cultural. El prestigio -innegable- que rodea a Mario Vargas Llosa -no solo en lo estrictamente literario, sino también como referente cultural y, más allá de eso, como dueño de una privilegiada agenda política gracias a sus relaciones con mandatarios de todo el mundo- constituye el argumento definitivo para que el Gobierno vea en él el candidato ideal.
La propuesta lanzada desde el Gobierno a Vargas Llosa viene a certificar el prioritario peso que el gobierno de Mariano Rajoy quiere otorgar al Cervantes, dentro de una ambiciosa estrategia de acción cultural exterior.
El consenso entre Exteriores y Cultura con vistas a sentar a Vargas Llosa en la presidencia de la institución es total, subraya El País. Tanto en el ministerio de Educación, Cultura y Deporte de José Ignacio Wert como en el de Exteriores que preside José Manuel García-Margallo pretenden que el Instituto sea el auténtico pabellón de una política centrada en el valor del idioma, tanto cultural como económicamente.