IMG_7214Trinity Church, la iglesia episcopal en el bajo Manhattan, tiene problemas de dinero.

Serios problemas que han causado enorme angustia entre sus miembros y ha dividido la congregación, informa Sharon Otterman en The New York Times.

La manzana de la discordia, en el caso de la iglesia que también se conoce como Trinity Wall Street por su cercanía al centro mundial de las finanzas, se debe a que la  congregación no ha logrado un acuerdo sobre qué hacer con el dinero de la institución.

Unos creen que la iglesia debería usarlo para ayudar a los pobres y esparcir la fe.

Otros, incluyendo el actual rector, creen que no es necesario realizar ningún cambio, que hay que ejercer la prudencia con el dinero de la iglesia.

Se trata de una considerable fortuna calculada alrededor de los US$2 mil millones, dice el Times.

Se traza a un legado de la reina Ana de Inglaterra en 1705 que otorgó a la iglesia (la más antigua de la isla) 215 acres de tierras. Vírgenes entonces hoy lo más caro de la isla, dice el Times.

“”Las propiedades de la Iglesia Trinity se incluyen entre las más valiosos de toda la Ciudad de New York, debido a que están ubicadas en el borde de los mejores barrios de la ciudad – SoHo, Tribeca y Greenwich Village”, dijo al Times Mitchell L. Moss, profesor de política de planificación urbana en New York University.

Su gran mayoría de propiedades es en Hudson Square, un área comercial junto a la entrade de Holland Tunnel, donde los edificios industrial anteriores a la segunda guerra mundial, diseñados para plantas de impresión, han sido reemplazadas por compañías creativas y de tecnología con restaurantes y galerías en la planta baja, dice.

Dice el Times que un miembro de la congregación ha entablado una demanda pidiendo transparencia — las cuentas de la iglesia son guardadas bajo secreto — e incluso cuestionando los US$450,000 anuales que gana el rector de la misma. 

Recuerda el Times que la iglesia ha ocupado titulares de la ciudad en años recientes, tanto a raíz de sus pugnas intestinas y renuncias, como por su relación con el movimiento Occupy Wall Street, que tenía su base en el parque a metros de la venerable institución.

Mientras que la iglesia permitió que los manifestantes usaran los baños, dice el Times, no protestó cuando detuvieron a miembros del grupo por traspaso ilegal. Los manifestantes se pusieron furiosos y ocuparon los predios por meses.

Artículo en inglés

Foto cortesía jeffgun via flickr