Robin Thicke y Pharrell Williams, duo que en el verano 2013 lanzó el éxito “Blurred Lines” han sido declarados culpables de robar una canción de Marvin Gaye y por lo tanto deben pagar US$7.4 millones. Los herederos de Gaye, quien murió en 1984, había demandado al duo alegando que la música era de “Got to Give it Up”, lanzado en 1977. El jurado de Los Angeles les dio la razón.