Padre Fundador de EUA, autor de la Declaración de Independencia, el nombre Thomas Jefferson evoca reverencia y es nuevamente objeto de dos biografías que, según una reseña en el New York Times, justifican de una u otra manera su apoyo al esclavismo.

Escribe Paul Finkelman, profesor de derecho en Albany, que las nuevas biografías pecan del error de siempre: o bien minimizan el que Jefferson tuviera esclavos, o si no lo justican diciendo que era un hombre complicado en una época complicada.

Pero, señala Finkelman, la “fea realidad” es que Jefferson fue un “hipócrita brutal y espeluznante”.

Dice que Jefferson deja claro en sus escritos Jefferson que veía a los afroamericanos como inferiores a los blancos y casi subhumanos.

Vendió esclavos, separándolos de sus familias para sufragar los gastos de sus colecciones de vinos y de arte, dice.

Liberó únicamente cinco esclavos, señala, y únicamente porque eran parientes de Sally Hemins, la amante con quien tuvo descendencia.

La verdad, señala, es que a Jefferson no le molestaba el esclavismo.

Puedo haber escrito la Declaración de Independencia, pero en el medio siglo siguiente, incluso cuando otros como George Washington liberaban sus esclavos, Thomas Jefferson siguió siendo “un comprador y vendedor de seres humanos”.

Artículo en inglés

Cuadro: Jefferson de Rembrandt Peale Wikipedia