Muere Tom Wolfe

n el New York Times. en español un obituario sobre el autor estadounidense Tom Wolfe, quien dejó de existir el 15 de mayo en Manhattan.

Tom Wolfe, el periodista y escritor innovador cuya prosa salvaje le dio vida al mundo de los surfistas de California, los fanáticos de la personalización de los autos, los astronautas y a los ricos y aspiracionales hombres de Manhattan en obras como El coqueto aerodinámico rocanrol color caramelo de ron, Lo que hay que tener y La hoguera de las vanidades, murió el lunes en un hospital de Manhattan. Tenía 88 años.

Su fallecimiento fue confirmado por su agente, Lynn Nesbit, quien dijo que Wolfe fue hospitalizado por una infección. El escritor vivió en Nueva York desde 1962, cuando entró a trabajar como reportero en The New York Herald Tribune.

Wolfe comenzó su carrera en la década de los sesenta y fue uno de los pioneros en el uso de técnicas literarias en los trabajos periodísticos, lo que le valió un gran reconocimiento en la creación del movimiento conocido como Nuevo Periodismo.

Era conocido por ser un atrevido inconformista pero, en realidad, era célebre tanto por sus sátiras como por su vestimenta. Su figura resaltaba mientras caminaba por la avenida Madison: era un hombre alto, esbelto, de ojos azules, aún de aspecto infantil, que solía lucir impecables trajes de tres piezas hechos a la medida, camisas de seda a rayas con cuello alto blanco almidonado, pañuelos brillantes que asomaban desde el bolsillo del pecho, antiguos relojes de bolsillo y zapatos blancos. Una vez le pidieron que describiera su atuendo y Wolfe respondió: “Neopretencioso”.

Era una respuesta irónica, típica de un escritor que se deleitaba diseccionando las pretensiones de los demás. Tenía un ojo despiadado, una inclinación natural para detectar tendencias y luego darles nombres, como pasó con Radical Chic y The Me Decade, dos términos de su autoría que se convirtieron en modismos estadounidenses.

Su talento narrativo y la facilidad que tenía para caricaturizar fueron evidentes desde el principio de su carrera, que se diferenció por un estilo marcado por la pirotecnia verbal, la imitación perfecta de los patrones del habla, investigaciones meticulosas y un uso creativo del lenguaje pop y la puntuación.

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