Todas las encuestas favorecen al ‘comeback kid’, Luis Inacio Lula da Silva
La primera vuelta de las elecciones de Brasil es el 2 de octubre y todas las encuestas dan una holgada ventaja a Lula, legendario líder que ha participado en todas las luchas sociales del gigante sudamericano por más de 50 décadas. Queda, sin embargo, un interrogante, ¿aceptará Jair Bolsonaro una derrota? O seguirá el ejemplo de Trump y aceptará únicamente un resultado favorable?
Luis Inacio Lula da Silva disfruta de una holgada ventaja tanto en primera como en segunda vuelta en la elección que le regresaría la presidencia de un país donde tiene enorme apoyo popular, como víctima de persecusión política (encanado 2017-2019); presidente; líder del Partido de los Trabajadores; dirigente obrero en el ABCD de Sao Paulo, en una carrera que se remonta a los años 70, cuando un joven sin educación formal toma la dirección del sindicato metalúrgico en una empresa automotriz.
Pero Bolsonaro, derechista ex capitán del ejército y presidente desde 2018 en cuatro años marcados por la corrupción y la ineptitud, ha dicho que entregará las riendas del poder únicamente si no hay fraude electoral. Muchos analistas de la realidad brasileña interpretan estas palabras como una amenaza a seguir el ejemplo de su ídolo, Donald Trump.
The Guardian: Hace cuatro años, muchos brasileños observaban la perspectiva de una victoria del candidato presidencial de extrema derecha Jair Bolsonaro primero con incredulidad y luego, con razón, con horror. A medida que se acercan las elecciones del 2 de octubre, aumenta aún más el temor de que permanezca en el poder. Ha demostrado ser un líder imprudente e incompetente y sigue siendo una amenaza para la democracia y el planeta, incitando a los destructores de la selva amazónica, que actualmente están redoblando esfuerzos ante la perspectiva de perder a su paladín. Su principal rival, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, le aventaja por más 15 puntos porcentuales en la última gran encuesta. El peligro consiste en que Bolsonaro considere la votación real como algo irrelevante. Alrededor de un millón de ciudadanos, incluidas destacados líderes empresariales, políticos, del mundo de la ciencia y las artes, han firmado un manifiesto que advierte que la democracia enfrenta un “peligro inmenso”.
