En sus 94 años, Phyllis Johnson de Queensland, Australia, jamás había pasado por nada similar: un canguro rojo que se le tiró encima mientras colgaba la ropa a secar. Casi terminan ahí sus días.
Escribe la Associated Press que la nonagenaria tuvo que luchar por su vida. “Era más alto que yo, atravesó la línea de la ropa y vino directo hacia mi”.
Con el palo de la escoba y la ayuda del perro de la casa se defendió contra el furioso animal.
Aún así, sufrió varias lesiones que la obligaron a ser hospitalizada.
Según la AP, arece que el animal era una mascota de alguien que se escapó.
Las autoridades lograron controlarlo con spray de pimienta. Los ataques de los canguros contra humanos no son comunes, dijeron las autoridades.
Es la primera vez que se requiere spray de pimienta para controlar uno.
Foto cortesía de Chris Bloke via flickr
