Fuera PTSe calcula que al menos un millón de brasileños marcharon por las calles de 22 ciudades del país exigiendo la renuncia de la presidenta Dilma Rousseff involucrada en un escándalo de mordidas con Petrobras, la compañía petrolera del país. Aunque el fiscal general ha exonerado a Rousseff, quien encabezaba la junta directiva del organismo estatal, muchos en Brasil consideran imposible que ella no supiera qué estaba pasando.