La recién fundada agencia de espías del Pentágono enviará unos 1,600 espías a diversos países para informar sobre asuntos militares en cooperación con la CIA y, posiblemente, más allá del control por el congreso de EUA, informa Gregg Miller en el Washington Post.

Aún así, el director de la nueva agencia Servicios Clandestinos de Defensa (CDS por sus siglas en inglés) promete mantener informado al Congreso y ayudar a Washington a evitar más guerras en esta “era del perpetuo conflicto”.

Según el Post, el enfoque inicial será Africa, los grupos islamistas, las armas en Irán y Corea del Norte, más la modernización del ejército en China.

DCS, indica el Post, surgió de la cooperación más estrecha entre el Pentágono y la CIA en las guerras de Iraq y Afganistán.

La CIA se encargará de entrenar a los espías de la DCS.

Según el Post, la administración Obama prefiere las misiones espías secretas al conflicto armado.

Explica que antes de su formación bajo el nombre DCS, funcionaba como Agencia de Inteligencia de Defensa, una servicio de espías privado controlado por las fuerzas militares élite del JSOC.

Artículo en inglés

Foto cortesía Tony Fischer Photography via flickr