Mientras que en su mayoría los sindicatos de EUA siguen alineados con el Partido Demócrata, el creciente desencanto ante la incapacidad del presidente Barack Obama de crear empleos está apartando quienes históricamente han sido aliados.
Esta frustración está llevando a muchos dirigentes a apartarse del Partido Demócrata, retirando recursos humanos y financieros de las elecciones para el congreso nacional para dedicarlos a candidatos locales en quienes ven la única defensa de las políticas que buscan implementar los candidatos republicanos.
(En los estados del medio oeste de EUA, la elección en el 2009 de republicanos alineados con el Tea Party ha desencadenado una ola de medidas anti sindicales que ha retirado derechos obtenidos hace décadas).
Escribe Sam Hananel en Huffington Post que las contribuciones de los sindicatos a los candidatos federales han caído casi en un 40 por ciento comparadas con el 2009.
“La campaña de Obama fue grande, pero él ha gobernado en pequeño” dijo Larry Hanley, presidente del Amalgamated Transit Union.
Agrega que algunos sindicatos han dicho que boicotearán la convención Nacional del Partido Demócrata en Charlotte, N.C., como señal de protesta sobre la economía y la elección de un estado con leyes anti sindicales.
Dice que aunque en las celebraciones del Día del Trabajo, este lunes 5 de septiembre en EUA, el presidente acompañado por dirigentes sindicales hablará ante sindicalistas en Detroit, la tensión debe verse seriamente ya que en efecto está perdiendo un sector clave para la reelección del presidente.
Richard Trumka, presidente de la central sindical AFL-CIO, dice que “la nueva estrategia sindical es crear una voz independiente separada del partido Democrático”.
