En EUA, los titulares de los principales periódicos, programas de opinión dominicales y páginas web han dedicado el grueso de su cobertura a la intervención militar en Libia, empujando a un distante segundo lugar la crisis nuclear en el Japón.

Sin embargo, ello no significa que las cosas estén totalmente resueltas. Esto es lo que podemos extraer de un artículo escrito por Thomas H. Maugh II en Los Angeles Times. Ingenieros han logrado reactivar las bombas de enfriamiento en dos de los reactores de la central de Fukushima Daiichi, mientras que el reactor No 3, donde se han emitido las más altas dosis de radiactividad, sigue sumergido en agua de mar.

La técnica parece dar ciertos resultados y los niveles de las emisiones radiactivas se han reducido, agrega Los Angeles Times. Se espera que para el lunes haya sido restaurada la electricidad necesaria para el enfriamiento y así impedir una fusión total al núcleo en las seis centrales, lo cual podría significar que la crisis comienza a controlarse, al menos por ahora.

Hay que recordar, sin embargo, que la planta ha sufrido tres explosiones de hidrógeno en una semana y la maquinaria está altamente oxidadada por causa del agua salada lo cual puede resultar en nuevas fallas en el funcionamiento. Ello podría significar nuevas complicaciones, aún si se logra restaurar la electricidad para el enfriamiento.

Sin embargo, la radiactividad sigue apareciendo en el agua y los alimentos, lo cual podría ser la próxima fase del cataclismo.

La discusión en EUA se ha centrado sobre los peligros de que tenga lugar un accidente como el japonés, en una de las 104 centrales nucleares en EUA. Aquí puede ver las plantas nucleares más cercanas a áreas de actividad sísmica.

Artículo en inglés

Foto cortesía de ssoosay via flickr